Columna Fedefruta: Planteamientos para las próximas temporadas

Columna de Juan Carlos Sepúlveda, Gerente General de Fedefruta, en Revista del Campo.

Tras la Fruittrade que realizamos a comienzos de este mes, abrimos la temporada 2018-2019 sentando los principales lineamientos de esta y de las próximas campañas, con el fin de atender las exigencias del mercado, la coyuntura climática-productiva, y estar preparados para enviar fruta que obtenga la mayor rentabilidad posible.

El clima es una variable siempre presente en la agricultura, y que ahora nos trae un año bastante seco que afectará a las cuencas más pequeñas y sin glaciares que se encuentran, principalmente, entre las regiones de Valparaíso y Biobío. Expertos previeron en nuestra convención un fortalecimiento del Fenómeno de la Niña, lo que podrá traernos complicaciones que habíamos olvidado en la última década.

Para enfrentar esta situación y dar con el máximo potencial de producción y calidad, los fruticultores debemos modernizar los campos y adaptarnos a las nuevas tecnologías, integrando los últimos avances tanto en el riego como en la fertilización, la aplicación de agroquímicos en conjunto con la utilización biopesticidas, y manejos agronómicos en general.

Esto, junto con el urgente recambio de especies y de nuevas variedades, entre otros motivos, por la situación actual que vive la uva chilena de la zona centro-norte, con incremento de stock a causa de la guerra comercial existente, y con la normalización y aumento de las exportaciones de Perú. Además, hay que seguir avanzando en la conquista de nuevas zonas frutícolas en el sur del país, donde existe un clima privilegiado para producir fruta de alto valor agregado.

Pero si queremos mejores precios, las tareas también van por el descomprimir-diversificar mercados y el poder adoptar manejos como el System Approach. Sobre esto último, el 46% de nuestras exportaciones de uva de mesa se va a Estados Unidos, y la totalidad de ese volumen es fumigado, lo que nos deja en una situación de desventaja frente a nuestros competidores, que pueden entrar a dicho mercado sin esta obligación.

Integrar este enfoque sistemático es tan imperioso como posible para Atacama y Coquimbo, como también, que nuestro sector se adentre en nuevos mercados para descomprimir nuestra oferta, abriendo rutas para los envíos hacia el Sudeste Asiático, labor que está en nuestra mira. En China, a su vez, nuestras autoridades nos han informado que en la próxima temporada se podrá exportar la pera chilena a ese destino, y nos hemos unido al Chile Week organizado por Cancillería, para apoyar el ingreso de los cítricos a China, donde el potencial para estas especies es enorme.

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